domingo, 1 de mayo de 2011

¿Qué es lo que se viene?

En este video nos muestran algunas tendencias y avances de la informática y bueno, quisás prepararse para lo que viene :O véalo, es bien interesante: http://www.youtube.com/watch?v=2mQLcYE2L3s&feature=related

¿Impacto negativo?

Por ahora, es difícil estimar el impacto de la nueva tecnología informática sobre las oportunidades futuras de trabajo, debido a que aún no sabemos cómo va a proceder el cambio. Ciertamente, es difícil prever cómo se van a generar nuevas oportunidades de empleo para reemplazar las pérdidas en las industrias de manufactura tradicionales. Si la tecnología informática ha de servir como elemento de cambio a las economías de países industrializados para generar nuevo crecimiento, entonces debe enfocarse en la creación de nuevas fuentes de trabajo, y en un número razonable de empleos. Actualmente, se tiene conocimiento de la situación en algunos lugares de trabajo, en los que la tecnología informática ofrece oportunidades de enriquecer empleos y desarrollar nuevas formas de organización laboral, transformando las relaciones laborales tradicionales. La situación que emerge es variada: va desde la situación en que la pérdida de habilidades y control, que indudablemente ha ocurrido en algunos sectores, provoca el temor de que el trabajador del futuro se vea degradado frente a la computadora, en lugar de apoyado por ella, hasta el otro extremo, en el que la satisfacción en el trabajo se ha mejorado claramente mediante el uso de la computadora. La diferencia entre ambos extremos depende en mucho de la forma en que la introducción de la tecnología se realice, así como de los cambios y sus respuestas a una serie de problemas especialmente políticos. Aún cuando formalmente la industria parece haber optado por no tomar parte, el futuro del empleo parece ser todavía una cuestión relativa a la introducción de tecnología.
Del mismo modo, nuevas formas de crimen mediante computadoras surgen y necesita ser entendidas y analizadas, y más recursos dedicados a su detección. El crecimiento de las bases de datos e información está creando un temor generalizado de pérdida de privacidad, haciendo patente la necesidad cada vez mayor de leyes para una adecuada protección de datos e información. Esto podría restringir el uso de información personal por parte de las compañías de tarjetas de crédito, telefónicas, de correo, de ventas, y hasta organizaciones políticas.
A nivel global, es necesario considerar y analizar el impacto social y económico de la tecnología informática sobre los países del Tercer Mundo, como una posible vía para disminuir las diferencias Norte-Sur. Por un lado, algunos expertos opinan que, basadas en el desarrollo de tecnología informática, las naciones menos desarrolladas tiene una oportunidad de aventajar a los países más industrializados. Sin embargo, otros expertos proponen contrariamente que la tecnología informática contribuirá más probablemente a solo incrementar la obsolescencia de las industrias, servicios y estrategias de desarrollo del Tercer Mundo.

¿Qué impacto ha generado?

Esta revolución no se encuentra restringida únicamente al mundo de la ciencia y tecnología, sino que trae consigo sorprendentes cambios en la forma en que vivimos y trabajamos, y quizá, hasta cómo pensamos.
Informática es, en el sentido más estricto, la nueva ciencia de recolectar, almacenar, procesar y transmitir información. Es posible considerar su impacto social por la cantidad de personas involucradas directa o indirectamente en tales actividades. Sin embargo, aún cuando el número de personas que se encuentran directamente empleadas en actividades informáticas es relativamente pequeño respecto al total de la fuerza de trabajo, si consideramos actividades que indirectamente dependen de la informática, como las actividades bancarias y de seguros, de los gobiernos centrales y locales, así como educación y entrenamiento, es claro que un buen porcentaje de la fuerza de trabajo gira alrededor de la informática. Y dado que todos utilizamos información en algún momento, eventualmente no habrá nadie que no sea afectado por la Revolución Informática, ya que finalmente, información es el flujo vital de las sociedades industriales modernas.
La informática ha entrado en todo los niveles de la vida cotidiana. En el hogar, microprocesadores están ya controlando videograbadoras, hornos de microondas, y hasta lavadoras. Las computadoras personales no sólo se utilizan para entretenimiento: cada vez es mayor el número de personas, especialmente profesionales, que están utilizando computadoras personales para trabajar desde casa, en ocasiones hasta en forma permanente. En la escuela, las computadoras han llegado al salón de clase, donde una nueva generación de jóvenes crece sabiendo más sobre computadoras que la generación de sus padres, y en ocasiones, más que sus maestros. La computadora personal ha entrado en la oficina, donde la informática está reemplazando el papeleo y mejorando la productividad, el servicio al cliente, y para algunos, la satisfacción en el trabajo. Bancos, negocios y servicios financieros se están transformando mediante la informática, debido a que el dinero, a fin de cuentas, es meramente información. Ningún tipo de servicio comercial o público ha permanecido libre de la nueva tecnología informática. En las fábricas, las computadoras se han involucrado cada vez más en el proceso de manufactura.

ORÍGENES

La primera computadora electrónica digital, ENIAC, fue construida en 1946, en la Universidad de Pennsylvania. Pesaba 30 toneladas, llenaba un espacio equivalente a un garaje para dos automóviles, y contenía 18,000 bulbos, que tendían a fallar uno cada siete minutos. Su costo: un millón de dólares (a precios de 1946).
Hoy, la misma cantidad de poder de cómputo se encuentra contenido en un pequeño circuito integrado de silicio, o microprocesador. Actualmente, casi cualquier computadora personal, costando alrededor de 100 dólares, es capaz de sobrepasar por mucho el desempeño de la ENIAC. Esto resulta sorprendente, ya que si otras industrias, como por ejemplo la automotriz o aeronáutica, se hubieran desarrollado en forma similar a la industria de la computación, un Rolls-Royce costaría 2.75 dólares y recorrería 3 millones de millas con un galón de gasolina. Y un Boeing 767 costaría sólo 500 dólares y podría dar la vuelta al mundo en 20 minutos con 5 galones de combustible.
Esta dramática reducción en los costos de poder de cómputo ha coincidido con la conversión de señales analógicas a señales digitales en la industria de las telecomunicaciones. Básicamente, las señales digitales siguen la misma técnica de ``flujo de números'', usada en computación. El resultado ha sido una convergencia de innovaciones tecnológicas en electrónica, computación y telecomunicaciones, llamada por algunos científicos la ``Revolución Informática''.